La Fresneda está situada en la provincia de Teruel y pertenece a la Comarca del Matarraña/Matarranya, considerado uno de los enclaves más bellos de Aragón.   Declarada en 1983 Conjunto Histórico-Artístico, en esta villa de origen medieval encontrará una buena mezcla de arquitectura típica popular con la noble arquitectura de sillería.

La Plaza Mayor es uno de los conjuntos arquitectónicos más hermosos de toda la comarca.
Destaca el Ayuntamiento, construido en 1576 (s.XVI) declarado Bien de Interés Cultural y está reproducido en el Pueblo Español de Barcelona, es de estilo gótico-renacentista y gótico-tardío en la fachada de la Calle Mayor, calle porticada donde arranca el barrio de la judería.   Se recomienda pasear por sus calles y descubrir bellos arcos, como el que da acceso a la Plaza Mayor, el llamado Arco de Xifré (s.XVI) y bellas edificaciones civiles y religiosas de los siglos XVI al XVIII, como el Ayuntamiento y su Lonja, el Palacio de la Encomienda, el Convento de la Virgen de Gracia o las ruinas de la Ermita de Santa Bárbara (Observatorio Luni-solar).

El edificio del Ayuntamiento de tres plantas fue construido en el año 1576 (s.XVI) y es uno de los más monumentales de la provincia, donde se conjugan los estilos gótico y el renacentista.   Las tres fachadas de piedra de sillería, son diferentes entre sí.   La fachada principal es renacentista, en la planta baja hay un arco rebajado que da acceso a la lonja.   En la planta noble se encuentra un balcón descentrado con dos puertas con decoración manierista y frontones curvilíneos partidos con pináculo, entre éstas puertas se sitúa el escudo de la villa con el fresno.   La planta tercera tiene una galería de arquillos de medio punto, típica en los edificios renacentistas aragoneses, pero en lugar de estar rematada con el típico alero tiene una serie de torrecillas que simbolizan las almenas de una fortificación militar, un torreón cilíndrico en cada esquina y el reloj que se añadió en 1923.

En la planta baja hay una gran lonja divida en dos espacios por columnas y arcos de medio punto.  En la fachada de la calle Mayor de estilo gótico-tardío destacan tres ventanas amaineladas y en la parte superior tres gárgolas zoomorfas, curiosamente la gárgola de la izquierda está dotada de atributos masculinos bien marcados.   Por la fachada lateral derecha se tiene acceso a interesantes salas, algunas de ellas rehabilitadas como espacios con contenidos culturales y turísticos.   Entre ellas, el Centro de Interpretación del Patrimonio de la localidad, con una serie de vitrinas y restos arqueológicos, paneles explicativos, una maqueta del término municipal y la "Cárcel de lujo", donde se conservan grafittis de temática religiosa y militar realizados por los presos que la ocuparon entre los siglos XVII al XVIII.   En el edifico anexo al Ayuntamiento, en la calle mayor, donde esta instalada la Oficina de Turismo, se ha recuperado otro interesante calabozo del tipo cárcel-pozo, un espectacular conjunto dentro de la Ruta de la Cárceles del Matarraña/Matarranya.

La Fresneda pertenece a la Ruta de las Cárceles, antiguas cárceles que estuvieron en uso durante los siglos XVI al XIX y que muchas de ellas han permanecido intactas hasta nuestros días.
En diversas localidades de la Comarca se ha realizado un interesante e innovador proyecto de recuperación de las antiguas cárceles y calabozos excepcionalmente bien conservados y que habían permanecido en el olvido.
En La Fresneda, la mazmorra o cárcel de arresto se sitúa en la Calle Mayor, a la izquierda de la lonja del ayuntamiento.   En la planta baja estaba la vivienda del carcelero y en la sala de la izquierda encontramos un agujero en la esquina, hoy en día cerrado por seguridad, por el que se arrojaba la comida a los presos peligrosos que también, eran arrojados a través del pozo cuadrado central y del que ya no salían.   En la planta superior hay dos salas, una con ventana enrejada a la calle Mayor y otra en la que se abre una verja hacia la lonja, en las paredes del siglo XVI se aprecia algunos graffitis de personas, calendarios, capilla, cipreses, cruces, etc.
La cárcel de lujo era una estancia reservada a los reos de alto nivel social como la nobleza, clérigos y militares.   Está situada dentro del ayuntamiento y se accede a ella por una pequeña puerta adintelada de poca altura, ya que fue una forma de humillación para los nobles por el hecho de tener que agacharse.   Conserva el pavimento y las paredes originales, donde se aprecian interesantes graffitis de juegos (tres en raya), representaciones religiosas, militares, etc., grabados ó pintados con sangre de animal u óxido de hierro.

El Palacio de la Encomienda data del siglo XVI y fue utilizado como residencia por el Comendador de la Orden de Calatrava.
El estilo renacentista de este edificio queda reflejado en las tres plantas típicas.
En la parte inferior: tres grandes arcos de medio punto sobre columnas jónicas y sobre la puerta de acceso se encuentra el escudo de armas de la Orden, balconadas de hierro forjado en la planta noble y en la planta superior la mitad presenta la típica galería de arquillos aragonesa.   En el interior destaca una robusta barandilla de madera, una trabajada celosía y en el techo en escayola la cruz flordelisada característica de dicha orden.
Este edificio está representado en el Pueblo Español de Barcelona, en la actualidad es un edificio privado en el que se venden aceite de oliva y olivas de producción propia, además de muebles antiguos restaurados.

En la zona más elevada de la población, junto a las ruinas del castillo, se encuentra la Iglesia Santa María la Mayor, construida entre los siglos XVI-XVII.   Es un edificio de grandes dimensiones y de un gran valor monumental, donde se unen varios estilos arquitectónicos, de estilo renacentista-barroco asentada sobre una anterior construcción gótica.   La fachada es sencilla de principios del barroco, con dos puertas, bajo arco de medio punto y columnas clásicas adosadas, destaca su campanario hexagonal de poca altura, cuyo campanario se conservan las carraclas (sonaban en Semana Santa, cuando estaba prohibido tocar las campanas, en señal de duelo).
En su interior barroco, destaca el retablo del altar mayor con cuatro tablas originales, la ornamentación y el colorido de sus cúpulas esgrafiadas y la decoración de labor mudéjar de los arcos de la nave central.
En el coro se conserva la antigua sillería de nogal con misericordia, el clavicordio y el atril giratorio.  Como curiosidad en el interior de la antigua sacristía hay letrinas y un cuarto de castigo de la Inquisición. La parte exterior del edificio estó bien conservado, pero su interior está ligeramente deteriorado por la humedad.

La Capilla del Pilar construida en el siglo XVIII es un hermoso edificio de estilo barroco y un gran ejemplo del rococó.   Destaca el prominente arco que protege la puerta de entrada, sobre ésta el escudo de la villa y encima una hornacina con la figura de la Virgen.  El interior es de estilo rococó-barroco-tardío, las pechinas están decoradas con imágenes de la Virgen del Pilar y a la izquierda. del altar mayor tenemos la joya de la corona: un retablo traído del convento de la Virgen de Gracia con tablas originales de finales de 1400 s.XV.

El Convento de la Virgen de Gracia, a unos 5 Km. del núcleo urbano, se alza imponente en el paraje boscoso del "Valle del Silencio".
Según cuenta la leyenda, una pastorcilla de Valjunquera encontró en una cueva del monte de la Mangranera la figura de una Virgen.   Se la llevó a su pueblo, pero al cabo de unos días la imagen desapareció y la volvieron a encontrar en este lugar por lo que se decidió levantar aquí una pequeña ermita en honor a la Virgen de Gracia.
En 1580, la villa cedió la ermita y su terreno a la Orden de Mínimos de San Francisco de Paula, lo que marcaría el principio de una relación con el pueblo que duraría casi 300 años.
Los religiosos construyeron aquí un nuevo convento en el s. XVIII, de sillería, distribuido en cuatro plantas y provisto de celdas y servicios para la comunidad y los peregrinos.   Además, estaba comunicado internamente con la capilla de la Virgen.
A partir de 1795 también construyen una gran iglesia de tres naves de estilo barroco con elementos neoclásicos en la fachada.   La cabecera se apoya en la cueva con una girola entre ésta y el altar mayor. Es uno de los santuarios más destacados de la provincia y por ello, en el 2001 fue declarado Bien de Interés Cultural.   La población de La Fresneda conserva la tradición de organizar la romería el primer fin de semana de mayo al "Convent" o Santuario de la Virgen de Gracia.

En el cerro de la Ermita de Santa Bárbara se conservan los restos de un posible poblado de la Edad del Bronce o del Hierro y una serie de curiosas "cullas o pocetas" con canalillos excavados en la roca que aparecen dispersos o agrupados en distintos puntos de la meseta y que han sido interpretados como evidencia de un observatorio prehistórico.   Desde el año 2003, se celebra en Santa Bárbara la fiesta del Solsticio de Verano en la que cientos de personas disfrutan de un inolvidable amanecer desde este privilegiado lugar cada 21 de junio.   A los pies de la ermita se encuentra un antiguo Calvario de sinuoso trazado, que asciende serpenteando a la cima jalonado de cipreses centenarios y restos de antiguas capillas desde donde se puede contemplar un paisaje excepcional.